El mantenimiento de las piscinas enterradas a menudo resulta costoso y complicado. Filtración, limpieza, desinfección química, pérdidas de agua: muchos aspectos pueden aumentar de manera preocupante los gastos ligados a la gestión normal de nuestras piscinas enterradas.

¿Cómo resolver este problema? Como veremos a continuación, es posible adoptar algunas medidas sencillas para reducir considerablemente los costes y las preocupaciones: nuestra amada piscina se mantendrá limpia, segura y eficiente. Descubramos juntos cómo.

¿Pensaste alguna vez cuánto inciden los daños de las mangueras en los gastos de mantenimiento de las piscinas?

El mantenimiento de las piscinas enterradas no es tan banal como parece. Por ejemplo, para mantener el agua de la piscina limpia y desinfectada, son indispensables los preparados a base de cloro. Además de permitir que el agua se mantenga cristalina, el cloro protege contra las bacterias y otros agentes patógenos.

Sin embargo, el cloro y el ambiente ácido –que inevitablemente se crea– son los mayores responsables de la corrosión de las mangueras. Con el tiempo, las tuberia enterradas, que ya deben soportar la presión ejercida por el terreno, sufren en su interior las agresiones continuas de los agentes químicos

La concomitancia constante de estos factores debilita las mangueras y origina grietas y pérdidas de agua que se traducen en gastos inesperados y exorbitantes.

Como si esto fuera poco, reparar las pérdidas de agua es complejo: a menudo la única solución es excavar todo el perímetro de la piscina para desenterrar las mangueras y buscar las fallas. Además, al alto coste de la operación hay que añadir las consecuencias de la obra y las molestias que implica (jardín arruinado, tránsito de personal y maquinaria…).

Un consejo útil para evitar estos problemas:

El perfecto mantenimiento de las piscinas enterradas comienza por las mangueras: ¡elige la manguera correcta!

Parece obvio pero no lo es: la elección precisa de las mangueras en el momento del proyecto o del mantenimiento es fundamental.

Para evitar facturas exorbitantes y altos costes de reparación es necesario que la piscina enterrada esté dotada de mangueras:

• elásticas
• resistentes a los ataques químicos
• resistentes a las cargas estáticas
• fáciles de colocar
• flexibles y adecuadas para todo tipo de terreno

FITT B-ACTIVE es la manguera de PVC flexible espiral que posee todas estas características indispensables, para un sereno y consciente mantenimiento de las piscinas enterradas. La eficacia de la manguera de PVC FITT B-ACTIVE, protegida contra los esfuerzos mecánicos externos y las agresiones químicas internas, está certificada por numerosas patentes. Para disfrutar de nuestra piscina al máximo y en total seguridad aprendamos a elegir componentes resistentes y de calidad.

Mantenimiento de las piscinas enterradas: instrucciones inteligentes para el uso

En el mantenimiento de las piscinas enterradas –como hemos visto– la elección de las tuberias resulta fundamental. El cloro y el ambiente químico que se forma en los conductos de la piscina son indispensables para garantizar la salubridad del agua y nuestra salud. Sin embargo, al mismo tiempo los agentes químicos corroen las mangueras y generan fallas y pérdidas de agua.

Si dotamos nuestra piscina de mangueras de PVC flexible espiral FITT B-ACTIVE podemos prevenir uno de los problemas más molestos y, lamentablemente, más caros: la rotura y sustitución de los conductos hídricos.

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